Tuesday, March 13, 2012

La altura, el encierro y el taladro acústico






Dicen que el martes 13 ni te cases ni te embarques, no me estoy casando ni en planes de hacerlo, pero estoy haciendo algo peor para esta superstición... estoy subido en un avión.
Mi objetivo es una reunión de preproducción para un comercial, pero eso poco tiene que ver con lo que está sucediendo, algo tan nefasto que le puede arruinar el día a la más bondadosa de las almas. Es más creo que esto le arruinaría el día al mismísimo Chespirito.
Pocos asientos más adelante una señora viaja con un bebé, es un niño pequeño de unos 2 años pero con pulmones de un babuino macho de 8. El niño está incómodo por la falta de espacio y estímulos cosa que lo lleva a usar su arma más letal, algo que yo llamo "el taladro acústico".
Nace en su pancita y sus pulmones pero bien podría venir del infierno, llega a su garganta y sale con la agudeza de un pedazo de vidrio roto, sacudiendo su campanita como las orejas de un perro cuando saca la cabeza por la ventana del auto. Sale de su boca y se esparce rápidamente por toda la cabina cuidadosamente aislada, acústica y presurizada.
El sonido no viaja tan rápido como la luz, pero este sonido lleva la fuerza de la juventud, así que su velocidad en este entorno viaja más rápido que un chisme en el departamento de cuentas, entra en mis oídos, aprieta mis tímpanos, le mete una patada a mi cerebro, se campanea en mi hipotálamo y hace lo mismo en su camino de salida, haciéndome regresar unas horas en el tiempo y pensar:
Oh, Dios, ¿por qué oh Dios no agarré los audífonos del cajón?
Memo Rex-- Desde Su iPad

Ubicación:Muy alto entre Quito y Cuenca

No comments: